El planteamiento de estas jornadas es propiciar la reflexión colectiva y el debate. Por este motivo hemos planteado cinco charlas indroducidas y dinamizadas por personas acostumbradas en la temática a abordar, si bien la idea es dar el protagonismo al debate entre todas.
Os adjuntamos el título y la presentación de los distintos debates, y un poco de material para darle unas vueltas a los diversos temas.
La dualidad campo/ciudad, mundo rural/mundo urbano se ha desvanecido, puesto que el proceso de urbanización capitalista ha devorado y colonizado todo el territorio, convirtiéndolo en periurbano para sus servidumbres. De esta forma tenemos más fincas en manos de cada vez menos personas (personas que no trabajan la tierra pero que extraen muchos beneficios), una expansiva agroindustria -nociva y asistida por la PAC- y una industria del entretenimiento que explota el verde (de los prados), el blanco (de la nieve) y el azul (de ríos y mares). Y a su estela la necrourbanización, la artifilización de las afueras y la naturaleza como fábrica.
¿Recordáis aquel anuncio donde aparece una gente urbanita montada en un lustroso coche y perdida en una aldea, que piden una auténtica fabada? ¿Y cómo una mujer que se hace pasar por campesina les sirve, sonriendo, una de pote? El viejo campesinado ha desaparecido o ha sucumbido a los cantos de los negocios fáciles, esparce purines y se entretiene con la televisión; por otro lado, una (dicha) nueva ruralidad busca el tranquilo negocio del verde que te quiero verde y se conecta a la glocalización de la fibra; el nuevo paisanaje huye de la barbarie y se entrega a la agroecología. Todo junto: una encrucijada de ruralidades.
Lo eco(lógico), de proximidad y el km0 se prodiga a través de la publicidad y se ofrece en las grandes cadenas alimentarias; casi todo el mundo quiere saborear con comodidad esta nueva “revolución verde”, sea edulcorada con la exclusividad de la gourmentización, sea en la condición de cliente cautivado por los bajos precios de cualquier hiper. Pero, ¿y la gente que ordeña un pequeño rebaño en extensivo, o lleva una huerta regenerativa? No todo es consumo, ni va de clientes: hace falta debatir sobre la producción y sus condiciones (también las limitaciones y contradicciones), y plantear la distribución fuera de las lógicas del mercado.
Queremos rehuir nostalgias e idealizaciones bucólicas de tiempos pasados y espacios perdidos, pero sin dejar de impregnarnos de memorias colectivas de todos los tiempos y lugares. El propósito es pensar y repensar el mundo rural, el de ahora y el de su futuro inminente, desde las críticas prácticas y con los pies en la tierra. El reto puede ser en forma de pregunta: ¿más allá del negocio verde y de la ilusión tecnológica, podemos concebir el mundo rural como alternativa civilizatoria? ¿Como multiplicidad de lugares donde vivir y expandir la autonomía?
No todo es necrópolis ni tampoco todo el verde es campo para el negocio. Una miríada de experiencias -con más o menos duración, más alegrías o más frustraciones, encuentros o desacuerdos- van haciendo, a modo de archipiélago disperso, diseminado; como un conjunto de islas unidas por aquello que las separa. Aquí, allá y más allá podríamos hablar de las tres des desde las que conjugamos nuestras prácticas: desmercantilizar, desestatalizar, desurbanizar; nuestras vidas, nuestros lugares, la tierra…
Per a qualsevol cosa escriviu a info@rehabitemlesruralitats.org
Cartell i logo de Victor Inox. Il·lustracions de la capçalera per MCmarco.